viernes, 2 de diciembre de 2011

¿De verdad son cristianas las costumbres navideñas?


EL ESPÍRITU NAVIDEÑO se hace presente desde finales de Noviembre y se comienza a sentir con más fuerza al comenzar Diciembre. Ahora le conviene preguntarse, ¿Que significa para usted la Navidad? ¿Son días de reflexión o de algarabía festiva? ¿Es la época de meditar en el nacimiento de Jesús o de olvidarse de los valores cristianos?

Tome en cuenta que las costumbres varían de un lugar a otro, hasta la misma palabra varía de un lugar a otro, la Real Academia Española señala que Navidad proviene del latín Nativitas, es decir, Natividad o Nacimiento, en este caso, de Jesucristo. Por otro lado, la palabra inglesa Christmas, proviene del inglés medieval Christes Masse o La Misa de Cristo, mientras que en alemán es Weihnachten que quiere decir Noche de bendición.

Examinemos pues las distintas costumbres que se dan en torno a esta celebración, y en especial, en México, uno de los países latinoamericanos con una rica cultura en tradiciones, entre estas, las navideñas son las que no pueden faltar. Esperamos que este pequeño análisis cambie su punto de vista con respecto a estas festividades.
  • El Nacimiento
Una parte fundamental de la tradición católica y que no puede faltar en Navidad es "el Nacimiento", ¿Que es esto? El Nacimiento es una representación, al estilo de una maqueta, del nacimiento de Jesús, de ahí el nombre. Este consta de figuras, sean grandes o pequeñas, que van desde barro, resina hasta el moderno plástico y que recrean la escena que rodeó el nacimiento de Jesús, donde aparecen María, José, pastores, los reyes magos, ángeles y animales, pero la figura central es el Niño Dios* (Nota al final), estas escenas son vistas en casas, iglesias, plazas, y otros lugares públicos.

La historia del Nacimiento se remonta al año 1223, en Greccio, Italia, cuando San Francisco de Asís celebró la Navidad con un grupo de campesinos de la región, en un establo vecino a su convento; el Niño, la Virgen, San José y los pastores eran personajes reales, como reales fueron el buey, la mula y las ovejas. Deseaba San Francisco por medio de esta representación, permitir a los campesinos participar del misterio que encierra el Dios hecho hombre en esa noche de Navidad.

Esta ceremonia tan bella y significativa, se difundió por toda Europa; cuando la representación dejó de ser necesaria para la instrucción de los adultos en la historia de Navidad, siguió como una decoración para la ocasión, al mismo tiempo que para acercar a los niños al misterio navideño.

Talvez a usted le parezca hermosa esta costumbre, pero siempre habrá quienes intenten quitarle su fe, incluso a los más débiles en la misma. Algunas personas podrán visitarlo en estos días a su casa para que no celebre estas fiestas y que no use el Nacimiento puesto que "no representa bien el relato bíblico". Desgraciadamente estas personas "...hablan injuriosamente de lo que ignoran" (2 Pedro 2, 12) por lo que analicemos a fondo esta costumbre.

En los Nacimientos siempre es común ver junto a María, José y el Niño, a un Buey, Vaca o Toro, y un Burro o Mula. Estos dos animales son parte tradicional de los Nacimientos, pero es cuestionado su inclusión en los mismos pues los Evangelios no muestran indicios de que estos animales hayan estado presentes.


La tradición de poner a dos animales en el Nacimiento viene del texto de Habacuc 3, 2 que dice "¡En el curso de los años, hazla revivir (tu obra), en el curso de los años, manifiéstala; pero en la conmoción, acuérdate de tener piedad!", Si no nota usted la razón del porque, conviene leer el texto original en griego que dice: "Te manifestarás en medio de dos animales; cuando estén próximos los años, serás conocido; cuando llegue el tiempo, te manifestarás". El texto en griego es el que dio el origen a esta tradición. Pero no solo este texto, sino que desde un inicio se le relacionó al de Isaias 1, 3 que dice: "El buey conoce a su amo y el asno, el pesebre de su dueño; ¡pero Israel no conoce, mi pueblo no tiene entendimiento!". Notese la mención del pesebre. El hecho de que Isaias mencionara que el buey y el asno reconocen al dueño pero Israel no reconoce al Señor, nos da un claro ejemplo de lo que pasaría con Jesús en su ministerio pues "Vino a los suyos, y los suyos no lo recibieron" (Juan 1, 11).

El uso de estos animales representa lo que Isaias dijo, y lo que Juan vuelve a recalcar en el Evangelio. El rechazo de Jesús de parte de sus compatriotas.

Otro punto que es de mención entre los que están en contra es el hecho de que los Reyes Magos aparezcan en la representación puesto que la Sagrada Familia ya no vivía en el establo, sino en una casa, además de haber pasado un lapso de tiempo determinado.

El Evangelio de San Mateo nos dice que "...y al entrar en la casa, encontraron al niño con María, su madre, y postrándose, le rindieron homenaje." (Mateo 2, 11)

Como podemos ver, la Sagrada Familia ya no vivía en el establo o gruta de Belén sino en una casa, en esa misma ciudad. Como el nacimiento de Jesús y la visita de los Magos no ocurrió al mismo tiempo, algunos rechazan esta costumbre. El hecho de que no hayan sucedido al mismo tiempo no es muy significativo, lo que si importa es el hecho de que los Magos realmente fueron a ver al niño Jesús y fue ahí donde se manifestó a los paganos por primera vez, eso es lo que importa más.

Hemos visto entonces que la costumbre del Nacimiento es una buena forma de recrear el acontecimiento más importante de la historia, y de gran utilidad para enseñarles este gran hecho a los niños.

Realmente, el Nacimiento nos invita a deponer los odios y rencores, a reconocer en la sonrisa tierna y acogedora del niño del pesebre las caras tristes o alegres de todos los niños del mundo; a reconocernos todos los hombres como iguales: ricos y pobres, doctos e ignorantes, niños y adultos, cristianos y gentiles, pastores y magos, porque para todos ha nacido el Niño. Dios invitó a TODOS al pesebre: a Herodes, a los sacerdotes, a los escribas y a los fariseos; pero únicamente fueron los pastores y los Magos.

  • Los Tres Reyes Magos
Otra de las costumbres navideñas es la de los Tres Reyes Magos. Esta costumbre es más evidente alrededor del 6 de Enero, cuando se celebra el "Día de Reyes".

La razón por la que esta costumbre es rechazada por la Biblia no menciona que fueran reyes, ni el número de magos. Veamos pues de donde se originó la costumbre de llamarlos "Los Tres Reyes".

¿Porque llamarlos Reyes?

El Evangelio de San Mateo los reconoce solo como "unos magos de Oriente" (Mateo 2, 1), ¿De donde surgió pues la idea de denominarlos "Reyes"?

El primero en convertir a los magos en Reyes, fue Tertuliano, teólogo y uno de los Padres de la Iglesia. Les asignó el titulo de Reyes basándose en "Que se inclinen ante él las tribus del desierto, y sus enemigos muerdan el polvo; que los reyes de Tarsis y de las costas lejanas le paguen tributo. Que los reyes de Arabia y de Sebá le traigan regalos; que todos los reyes le rindan homenaje y lo sirvan todas las naciones" (Salmo 72, 9-11).

Tertuliano encontró cierta similitud entre este pasaje a Salomón, hijo de David, con Jesús, también llamado hijo de David (Lucas 1, 32). El tratarlos de "Reyes" en vez de "magos" eran más aceptable a los teólogos, ya que "magos" se asocia con "brujos y hechiceros".

¿Que significa el que sean "magos"?

En la antigüedad este término designaba a los que se dedicaban a las ciencias ocultas y por lo tanto se empleaba para llamar a los astrólogos, hechiceros, augures sacerdotales y adivinos de diversa índole.

La descripción que hace Mateo sobre los magos interpretando una estrella nos inclina a considerarlos astrónomos, hombres cultos, representantes de lo mejor del saber y de la religiosidad pagana que los llevó a encontrar a Jesús a través de la revelación natural.

La descripción que hace Mateo de los magos interpretando la aparición de una estrella, nos permite pensar que eran astrólogos, hombres cultos, representantes de lo mejor del saber y de la religiosidad pagana que los llevó a encontrar a Jesús a través de la revelación natural.

Otro argumento es el trasfondo zoroástrico de los magos. El evangelio árabe de la infancia (un evangelios apócrifo) dice que: "vinieron a Jerusalén unos magos según la predicción de Zaradust", es decir Zoroastro quien según el manuscrito laurentiano del siglo XIII conservado en Florencia, hizo una profecía en la que declaró que una virgen había de dar a luz un hijo que sería sacrificado por los judíos y que luego subiría al cielo. A su nacimiento aparecía una estrella, bajo cuya guía se encaminarían los Magos a Belén y adorarían allí al recién nacido. También el códice Fb dice que los magos venían apo Persidos, es decir, de Persia.

Hay quienes afirman que la procedencia de los magos es de Arabia. Se apoyan en los regalos que traen los Magos en Mateo. Si leemos al profeta Isaías 60,6 dice: “Te cubrirá una multitud de camellos, de dromedarios de Madián y de Efá. Todos ellos vendrán desde Sabá, trayendo oro e incienso, y pregonarán las alabanzas del Señor.” y el Salmo 72,10-11.15 que dice”… que los reyes de Tarsis y de las costas lejanas le paguen tributo. Que los reyes de Arabia y de Sebá le traigan regalos“…Por eso, que viva largamente y le regalen oro de Arabia; que oren por él sin cesary lo bendigan todo el día.”

Los dones que presentan los magos de Mateo están en relación con las caravanas que venían de Arabia. Es ésta la teoría más antigua sobre la procedencia de los magos. Desde el año 160 d. C Justino Mártir escribía: "Unos magos de Arabia llegaron hasta él" refiriéndose a Herodes.

¿Porque montan en dromedarios?

También se les representa montando dromedarios, una especie de camellos con una sola joroba, basado en Isaias 60, 6 : "Te cubrirá una multitud de camellos, de dromedarios de Madián y de Efá." San Agustín dedujo que debieron montar en dromedarios por ser más rápidos que los camellos. Se les representa también en caballo, camello y elefante, porque antes se pensaba que venía de los tres reinos conocidos más importantes: Grecia, Egipto e India respectivamente.

¿Realmente fueron tres?

En cuanto al número de los magos o a su condición real, no hay referencia alguna en el evangelio de Mateo. El apócrifo evangelio armenio de la infancia nos habla de tres. También la versión etiópica del protoevangelio de Santiago consigna el número de tres Magos. La tradición oriental ponía doce magos y entre ellos los armenios llegaron hasta quince. En las catacumbas de Pedro y Marcelino aparecen dos; cuatro en el fresco del siglo IV de la catacumba de santa Domitilla. Finalmente prevaleció en la tradición de occidente el número de tres, basándose en los tres regalos que presentaron los magos al Niño: oro, incienso y mirra.

Sus nombres se los asignan tradiciones cristianas posteriores en los siglos VII y VIII d.C.

Mateo prefigura en los Magos a los cristianos gentiles que reciben y aceptan el mensaje de Jesús pues la venida de Jesús no es exclusivamente para el pueblo de Israel. La universalidad del mensaje de Jesús está presente en este episodio.

Hayan sido reyes o no, tres o más, los magos nos dan un ejemplo de ir al encuentro con el Señor cueste lo que cueste, así como ellos atravesaron los desiertos. La tradición los llevó a ser los que lleven los regalos a los niños en México y algunos países latinos, aunque en los últimos años se este acabando esta costumbre. ¿Que podía esperarse si los han convertido en mera imagen comercial?

  • Las Posadas

Las posadas son fiestas que tienen como fin, preparar la Navidad. Comienzan el día 16 y terminan el día 24 de Diciembre.

Su origen se remonta a los tiempos de la conquista, cuando los españoles llegaron a México, los aztecas creían que durante el solsticio de invierno, el dios Quetzalcóatl (el sol viejo) bajaba a visitarlos. Nueve días antes de la fiesta, a un esclavo disfrazado de Quetzalcóatl le decían: "Señor, sabrás que de aquí a nueve días se te acabará este trabajo de bailar y cantar porque entonces has de morir". Él debía responder: "Que sea muy en hora buena". Llegado el día de la fiesta, a media noche, después de honrarlo con música e incienso, lo tomaban los sacrificadores y le sacaban el corazón para ofrecérselo a la luna.

Durante el mes de diciembre, no sólo festejaban a Quetzalcóatl, sino que también celebraban las fiestas en honor a Huitzilopochtli. El 24 de diciembre por la noche y al día siguiente, 25 de diciembre, había fiestas en todas las casas. Se ofrecía a los invitados una rica comida y unas estatuas pequeñas de pasta llamada "tzoatl".

Los misioneros españoles que llegaron a México a finales del siglo XVI, aprovecharon estas costumbres religiosas para inculcar en los indígenas el espíritu evangélico y dieron a las fiestas aztecas un sentido cristiano, lo que serviría como preparación para recibir a Jesús en su corazón el día de Navidad.

El Papa Sixto V, concedió un permiso que autorizaba en la nueva España la celebración de unas Misas llamadas "de aguinaldos" del 16 al 24 de diciembre. En estas Misas, se intercalaban pasajes y escenas de la Navidad. Para hacerlas más atractivas y amenas, se les agregaron luces de bengala, cohetes y villancicos y posteriormente, la piñata.

Las posadas se llevaban a cabo los nueve días previos a la Navidad, simbolizando los nueve meses de espera de María. Las posadas, con el tiempo, se comenzaron a llevar a cabo en barrios y en casas, pasando a la vida familiar. Estas comienzan con el rezo del Rosario y el canto de las letanías.

Durante el canto, los asistentes forman dos filas que terminan con 2 niños que llevan unas imágenes de la Santísima Virgen y de San José: los peregrinos que iban a Belén. Al terminar las letanías se dividen en dos grupos: uno entra a la casa y otro pide posada imitando a San José y la Santísima Virgen cuando llegaron a Belén. Los peregrinos reciben acogida por parte del grupo que se encuentra en el interior. Luego sigue la fiesta con el canto de villancicos y se termina rompiendo las piñatas y distribuyendo los "aguinaldos".


¿Porque algunas personas rechazan las posadas?

Las Posadas son rechazadas por algunas personas debido a que mucha gente abusa de las fiestas y llega a olvidar los valores morales y cristianos durante estas fechas.

El Diario El Universal dice: "Las posadas, que fueron la forma de recordar la peregrinación de los padres de Jesús buscando un refugio para que el Niño Dios naciera, hoy sólo son días de borrachera, de exceso, de glotonería, de vanidades y más y más de crimen"

Ahora, ¿Es esta razón para rechazar y prohibir esta tradición?, hágase usted las siguientes preguntas, ¿Se emborracha en las posadas? ¿Comete actos inmorales o de vandalismo en estas fiestas? Si la respuesta es no, es lógico pensar que no toda la gente considera las posadas como meras fiestas donde los valores se pierden y los excesos abundan sin control.

San Pedro en su primera carta escribe: "Ya han vivido bastante tiempo conforme al criterio de los paganos, entregándose a toda clase de desenfrenos, a los malos deseos, a las borracheras, a los excesos en la comida, a las orgías y al culto ilícito de los ídolos. "(1 Pedro 4, 3) Si nos consideramos enserio cristianos, debemos evitar toda clase de actos inmorales y excesos en estas fiestas.

Cuando usted y yo tratamos de vivir las posadas de manera cristiana, muchas personas nos consideran, aburridas, pasadas de moda, como gente que no sabemos divertirnos. Esta gente ha olvidado el verdadero sentido de las Posadas y de estas fiestas. Bien San Pedro escribió: "Ahora los paganos se extrañan de que ustedes no se precipiten con ellos hacia ese desborde de libertinaje, y se deshacen en injurias contra ustedes." (1 Pedro 4, 4)

Si vivimos sanamente las Posadas no tienen porque estar mal o prohibidas, más bien la gente estrepitosa que se excede en todo, debe ser la que sea reprendida constantemente. El que cierta gente convierta estas fiestas en mera diversión, no quiere decir que todos las vivamos así.
  • El Árbol de Navidad
El origen del árbol de Navidad se remontan a las antiguas costumbres de los germanos, quienes creian que el dios Odin habia permanecido colgado de los pies de un pino en el solsticio de invierno.

Los druidas honraban a sus dioses colgando manzanas doradas y otras ofrendas en las ramas de un encino. Los origenes del árbol de Navidad se remontan a San Bonifacio quien convirtió al cristianismo a los alemanes en el siglo VII, cortando la encina sagrada de Geismar, a fin de acabar con el culto a los árboles. Martín Lutero contribuyo mucho a su popularización.

En diversas partes de Europa se cortaban ramos de espino y cerezo y se colocaban en lugares abrigados para que florecieran en Navidad. Algunas familias traían a sus hogares árboles enteros para competir con sus vecinos sobre los capullos más bellos. Esta costumbre dio origen para algunos a los actuales árboles de Navidad.

En el siglo XVI, en Alemania, se adornó el árbol de Navidad como hoy lo conocemos. A Estados Unidos llegó por medio de los soldados alemanes durante las guerras de independencia. Los primeros adornos fueron las tradicionales galletas de jengibre con forma de muñecos.

El árbol de Navidad actualmente representa el árbol de la vida del que colgaba el fruto prohibido del que comieron Adán y Eva y donde se produjo el pecado y del cual Cristo nos va a reconciliar. Las esferas representan las oraciones que hacemos durante el Adviento. Azules simbolizan oraciones de arrepentimiento, plateadas de agradecimiento, doradas de alabanza y rojas de petición. Las luces representan a Jesús, que es la Luz del Mundo (Juan 1,9) (Juan 9, 5). La estrella en la punta simboliza tanto la estrella que guió a los magos, como a la fe que debe guiar nuestras vidas. Otros adornos y figuras simbolizan los sacrificios que haremos y le regalaremos a Jesús, esto es por ejemplo, "Me voy a sacrificar dejando de ver mi programa favorito por ayudar en casa". Acciones como estas son regalos perfectos para Jesús en su cumpleaños.

Como vimos, el árbol de Navidad es un excelente forma de darles a conocer a los demás el simbolismo cristiano del misterio del nacimiento de Jesús.


ALGUNOS SE SORPRENDERÍAN

La Organización de los Testigos de Jehová llevan años tratando de evitar que la gente celebre la Navidad pues es para ellos una fiesta pagana.

Según esto Los primeros seguidores de Jesucristo no festejaban la Navidad.” (Revista “La Atalaya”, 15 de Diciembre de 2000).

Como hemos previamente escrito en artículos anteriores, el hecho de que los primeros cristianos no lo celebraran o que Dios no lo mandara no es muy significativo, así como los judíos celebran Hanukah, sin que sea mandato divino.

Lo que tal vez muchos no saben es que esta fiesta si era celebrada por la “Organización” hace décadas, y la celebró durante 30 años, desde que se fundó a finales de 1800 hasta mediados de 1900.

Se tiene evidencia de tarjetas navideñas enviadas por la organización a sus miembros, llamados “la nueva creación”. Es increíble ver como una organización que se considera el único canal entre Dios y los hombres haya cambiado súbitamente de posición.


Tarjeta navideña de la Organización de la Atalaya dando "Saludos cristianos y los mejores deseos a la nueva creación, Navidad 1916-1917" firmada por Charles Rusell, fundador de la organización.
















































  • Otras costumbres navideñas
Las Piñatas

Las piñatas tienen su origen en China, donde, al inicio del año chino en primavera, se llevaba a cabo una ceremonia en la cual los chinos elaboraban con papel la figura de un buey, la cubrían con papeles de colores y le colgaban herramientas agrícolas. Se rellenaban con cinco clases de semillas que caían cuando los reyes mandarines le pegaban a la piñata con varas de diferentes colores. Curiosamente al mismo tiempo los mayas golpeaban con una vara y vendados de los ojos, una olla de barro que colgaba llena de chocolate, esto lo practicaban como deporte.

La piñata está hecha con una olla de barro cubierta con papel de colores brillantes y representa al demonio, que suele presentar al mal como algo llamativo para seducir al hombre y que ceda a la tentación. (Ap 20, 8) (Ap 20, 10)

La piñata clásica es como una estrella de siete picos que representan a los siete pecados capitales: soberbia, avaricia, lujuria, ira, gula, envidia y pereza.

Pegarle a la piñata con los ojos vendados representa la fe, virtud que nos permite creer sin tener que ver. (Juan 20, 29)

El palo con el que se le pega a la piñata representa a la fuerza de la virtud que rompe con los falsos y engañosos deleites del mundo. Con la ayuda de Dios, se destruye al mal y así se descubren los frutos que hay dentro de la piñata, que representan a las gracias de Dios. El relleno de la piñata es símbolo del amor de Dios porque al romper con el mal, se obtienen los bienes anhelados.

A los frailes evangelizadores se les ocurrió que serviría de catequesis y se promovió que se rompieran durante el tiempo de Adviento como un complemento a las fiestas de las Posadas y con un sentido de conversión.

Las Pastorelas

Las pastorelas son una representación escénica, de marco festivo y alegre, que refiere acontecimientos previos a la venida de Jesús y termina con la adoración de los pastores a Jesús recién nacido en el pesebre. En ésta, se mezclan personajes divinos y humanos donde el destino eterno de los hombres ocupa el papel central de la trama. Los personajes centrales son Dios, la Virgen y los pastores que acuden a adorar al Niño Jesús en la gruta de Belén.

En el siglo XVI, en Italia, Torcuato Tasso dio a conocer el género teatral "fábula pastoril" que era una pastorela o villancico escenificado. La palabra pastorela viene del italiano "pasttorella" que en español significa pastorcilla.
En México, los mayas y los aztecas, hacían representaciones dramáticas de diferentes tipos: cacerías, hombres disfrazados de animales, curaciones importantes, etc. Los misioneros aprovecharon las inquietudes teatrales y religiosas del pueblo para evangelizarlo, suplantando poco a poco sus ritos paganos por las pastorelas.

El inicio formal de las pastorelas, según algunos historiadores, fue en 1527 en Cuernavaca con "La Comedia de los Reyes". En 1530 se escenificó "La Natividad Gozosa de Nuestro Salvador". Poco a poco se comenzó a escenificar el peregrinar de José y de la Virgen María y se fueron incorporando las aventuras de los pastores y las tentaciones que lograron vencer para llegar a Jesús. En las pastorelas se ve claramente la lucha entre el bien y el mal.

La Corona de Adviento

Aunque la Corona de Adviento tiene sus raíces en la costumbre pagana de prender velas al dios Sol para pedirle que regresara, actualmente es una costumbre cristiana que se encarga de indicarnos cuantos días faltan para la Navidad e invitándonos a reflexionar.

Su forma circular es señal del amor de Dios, que es eterno, sin principio ni fin puesto que el círculo no tiene principio ni fin. También, representa nuestro amor a Dios y al prójimo que nunca debe de terminar.

Verde es el color de esperanza y vida. Dios quiere que esperemos su gracia, el perdón de los pecados y la gloria eterna al final de nuestras vidas. El anhelo más importante en nuestras vidas debe ser llegar a una unión más estrecha con Dios, nuestro Padre.

Las cuatro velas simbolizan que así como las tinieblas se disipan con cada vela que encendemos, los siglos se han ido iluminando con la cada vez más cercana llegada de Cristo a nuestro mundo.

Son cuatro velas las que se ponen en la corona. Se prenden de una en una, durante los cuatro domingos de Adviento, al hacer la oración en familia. Se acostumbra usar diferentes colores: una morada, una roja, una rosa y una blanca. Hay quienes acostumbran poner tres velas moradas y una rosa o blanca. Se prenden primero las moradas que nos recuerdan que es tiempo de penitencia, de conversión. La blanca o rosa significa la alegría de la llegada de Jesucristo.

Los Villancicos

Los primeros villancicos que se conocen fueron compuestos por los evangelizadores en el siglo V, con la finalidad de llevar la Buena Nueva a los aldeanos y campesinos que no sabían leer. Sus letras hablaban en lenguaje popular sobre el misterio de la encarnación y estaban inspirados en la liturgia de la Navidad.


Se llamaba villanus al aldeano y con el tiempo, el nombre de estas canciones navideñas cambió a “villancicos”. Éstos hablan en un tono sensible e ingenioso de los sentimientos de la Virgen María y de los pastores ante el Nacimiento de Cristo. En el siglo XIII, se extienden por todo el mundo junto con los Nacimientos de San Francisco de Asís.

Cantar villancicos es un modo de demostrar nuestra alegría y gratitud a Jesús y escucharlos durante el Adviento ayuda a la preparación del corazón para el acontecimiento de la Navidad.

La Flor de Nochebuena

Esta flor es originaria de México. Su nombre náhuatl es cuetlaxochitl, que significa “flor de los pétalos resistentes” y para los aztecas, simbolizaba la sangre de los sacrificios que los indígenas ofrendaban al sol para renovar sus fuerzas.

Los españoles bautizaron la flor como Nochebuena porque florece en diciembre. Desde entonces, estas flores se usan como símbolo de las fiestas navideñas en todo el mundo. Sus colores verde y rojo son también los representativos de la Navidad.

El verde es esperanza, una esperanza en la espera de la segunda venida de Cristo. El rojo es la sangre con la que Jesús nos rescataria. Esta flor contiene los dos colores.

Los Bastones de Caramelo

De acuerdo a la leyenda, a principios del siglo 20, un fabricante de dulces de Indiana decidió inventar un dulce en honor a Jesús. El resultado fue el bastón de caramelo.

Usó un dulce duro porque Jesús es la roca eterna. La forma asemeja una “J” de Jesús o un cayado de pastor. Lo hizo blanco para representar la pureza de Jesús y le añadió una banda roja que simboliza la sangre que Cristo derramó por los pecados del mundo. A veces, se le añade una banda verde como un recuerdo de que Jesús es un regalo de Dios.

El sabor del dulce es de menta, que es similar al hisopo. Hisopo es una planta de la familia de la menta que se usaba en el Antiguo Testamento para los sacrificios y purificación. Jesús es el Cordero de Dios que se sacrificó por los pecados del mundo.

El bastón pues simboliza a Jesús el Buen Pastor, Roca Eterna y el Cordero que murió por nosotros.


El conocer el verdadero y cristiano significado de todas estas costumbres nos ayuda a saber mejor el porque realizamos y usamos ciertas cosas en estas fiestas navideñas.

El transmitir esto a los demás los ayuda a ellos también a no solo celebrar por celebrar, sino a comprender bien el porque de estas costumbres.

Navidad no es una época de consumismo donde solo hay que comprar, comprar y comprar, es reflexionar, recordar, y sobretodo cambiar. Cuando en su corazón hay más amor, es Navidad. Cuando en su corazón hay más caridad, es Navidad. Cuando en su corazón hay perdón y arrepentimiento, es Navidad.

Esperamos que este artículo le haya servido para aprender más sobre las costumbres navideñas. No lo olvide lo principal en Navidad es Jesús, a quien año con año celebramos con esta fiesta. Recuerde "La Palabra se hizo carne y habitó entre nosotros. Y nosotros hemos visto su gloria, la gloria que recibe del Padre como Hijo único, lleno de gracia y de verdad." (Juan 1, 1)


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* Hay un aspecto que no debe pasarse por alto. En la costumbre del Nacimiento mexicano, al niño Jesús también se le llama "Niño Dios", reflejando la idea de que Dios vino a la tierra como un bebé. Aunque algunos se oponen, la Biblia indica que efectivamente Dios, en la segunda persona de la Trinidad, vino al mundo como hombre. Compruebe usted mismo estas verdades: (Juan 1, 1) (Col 2, 9) (Fil 2, 6-7) (Juan 5, 18) (Juan 10, 30)